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En su entrevista mas fuerte hasta ahora, la estrella de Glee, Cory Monteith rebelo que en el pasado tuvo serios problemas con las drogas que hasta lo dirigieron a rehabilitación.
Insistiendo en que definitivamente no se parece en nada a su personaje Finn Hudson, Monteith cuenta a la revista Parade, "Soy tan afortunado en muchos aspectos, tengo suerte de estar vivo."
Monteith, que sus padres se divorciaron a los 7 años, dejo la preparatoria cuando tenia 16 después atendio una docena de escuelas diferentes. No tomo tanto tiempo antes de que su vida estuviera "fuera de control."
"Tenia un serio problema," declara Monteith. A los 19 años, decidió internarse en rehabilitación después de que su mama y unos amigos decidieran intervenir. Pero el primer intento no fue suficiente y volvió a recaer. Las cosas se pusieron peores.
"Robe una cantidad significativa de dinero a un miembro de mi familia, sabia que iba a ser atrapado, pero no me importo estaba muy desesperado. Fue como un llanto de ayuda. Fui confrontado y dije 'Si, fui yo.' Fue la primera vez que algo honorable y verdadero salio de mi boca en años."
El miembro de su familia le advirtió a Cory que tenia que limpiarse o iba a llamar a la policía.
Afortunadamente, accedió a la propuesta de su familiar y dejo de usar drogas. Se mudo a un pequeño pueblo en Canada donde tomo unas clases de actuación. Ahora de 29, Monteith dice que esta hablando de su pasado para ayudar a otros. "No quiero que los jóvenes piensen que pueden salir de la escuela y drogarse y después ser famosos actores."
La primera vez que entreviste a Monteith en el set de Glee en el 2009, el admitió que no tenia un diploma de la preparatoria, cuenta Mark Malkin (reportero de E!). "La escuela no era para mi, apenas puedo recordar el sexto y séptimo grado, simplemente no entendía por que tenia que aprender las cosas que me estaban enseñando, era como un espíritu de rebelión en mi."
Pero la primavera pasada, recibió su diploma de una escuela alternativa que curso en Canada.
